Uno de los mayores problemas que enfrentan las escuelas y los maestros hoy en día es el hacinamiento. Una combinación de una población en aumento y una disminución en la financiación ha provocado que el tamaño de las clases se dispare. En un mundo ideal, el tamaño de las clases se limitaría a entre 15 y 20 estudiantes. Desafortunadamente, muchas aulas ahora regularmente exceden los 30 estudiantes, y no es raro que haya más de 40 estudiantes en una sola clase.
El hacinamiento en el aula se ha convertido tristemente en la nueva normalidad. Es poco probable que el problema desaparezca pronto, por lo que las escuelas y los maestros deben crear soluciones viables para sacar el máximo provecho de una mala situación.
Problemas creados por aulas abarrotadas
Enseñar en un aula con muchos estudiantes puede ser frustrante, abrumador y estresante. Un aula abarrotada presenta desafíos que pueden parecer casi imposibles de superar, incluso para los maestros más efectivos . El aumento del tamaño de las clases es un sacrificio que muchas escuelas tienen que hacer para mantener sus puertas abiertas en una era en la que las escuelas no cuentan con fondos suficientes.
Las aulas abrratodas crean una serie de problemas para los sistemas escolares modernos, que incluyen:
- No hay suficiente maestro para todos
- Aumentan los problemas de disciplina
- Los estudiantes con dificultades se quedan atrás y no avanzan como deberían
- Las estadísticas escolares se ven resentidas
- El nivel de ruido general aumenta
- El estrés del maestro aumenta a menudo, lo que lleva al agotamiento extremo
- El hacinamiento conduce a un menor acceso a equipos y tecnología
Posibles soluciones
Si tienes que enseñar en una aula abarrotada es importante que tengas presente alguna soluciones para poder superar el día a día con éxito. Cuando nada funciona las escuelas pueden verse obligadas a promulgar lo que se conoce como una reducción de la fuerza, donde los maestros y el personal son despedidos por razones presupuestarias y el tamaño de las clases aumenta posteriormente. Incluso con presupuestos ajustados, las zonas pueden tomar ciertas medidas para aliviar los problemas de hacinamiento:
- Aprovechar la agrupación de habilidades. El tamaño de las clases debe mantenerse relativamente pequeño para aquellos que se desempeñan de manera insatisfactoria. Los estudiantes que son académicamente fuertes tienen menos que perder en un aula abarrotada.
- Proporcionar maestros con un ayudante. Proporcionar un maestro con un ayudante puede ayudar a disminuir la carga sobre el maestro. Los asistentes reciben un salario más bajo, por lo que colocarlos en aulas abarrotadas mejoraría la proporción de estudiantes / maestros y mantendría los costes más bajos.
- Solicitar donaciones. Las escuelas privadas pueden mantener sus puertas abiertas debido a la matrícula y en gran medida solicitando donaciones. En tiempos financieros difíciles, los administradores de las escuelas públicas tampoco deberían tener miedo de solicitar donaciones
- Solicitar subvenciones. Hay muchas de oportunidades de subvención disponibles para las escuelas cada año. Existen subvenciones para casi todo, incluida la tecnología, los suministros, el desarrollo profesional e incluso los propios maestros.
Soluciones para los docentes
Los docentes en aulas abarrotadas deben organizarse y deberán estar bien preparados cada día. Tendrán que desarrollar un sistema fluido a través de prueba y error para maximizar el tiempo que tienen con sus estudiantes. Los maestros pueden generar soluciones para aulas abarrotadas teniendo en cuenta lo siguiente:
- Crear lecciones que sean atractivas para los estudiantes para aumentar el interés
- Tener tutorías individualizadas para los alumnos con dificultades que necesitan más tiempo de estudio después de la escuela o explicaciones adicionales
- Asignar asientos en rotación siempre que sea necesario para poder tener a todos los alumnos cerca en un momento u otro del curso
- Comprender que la dinámica del aula abarrotada es diferente y que las diferencias serán significativas
Los maestros deben entender que no podrán pasar tiempo con cada estudiante todos los días. Deben comprender que no conocerán a cada alumno a nivel personal. Esa es simplemente la realidad en un aula abarrotada. Además, la estructura es muy importante en cualquier aula. Los maestros deben establecer reglas y expectativas claras el primer día, y luego seguir adelante a medida que avanza el año. Las reglas y expectativas claras ayudarán a crear una clase mucho más manejable, donde los estudiantes sepan qué deben hacer y cuándo, especialmente una clase abarrotada.