Las instituciones dependientes del Ministerio del Medio Ambiente han sorprendido al sector con la presentación de un informe clave sobre el creciente potencial de los nuevos yacimientos de empleo ‘verde’. Este informe llega en un momento crucial, ya que las energías renovables se están consolidando como uno de los sectores más dinámicos de la economía española y mundial.
Según los datos más recientes incluidos en el informe, se estima que el 20% de las empresas de energías renovables en España – que actualmente emplean a más de 100.000 trabajadores – tiene previsto aumentar su plantilla a corto plazo, resaltando la enorme demanda de talento especializado en el sector.
El auge del empleo en energías renovables en 2023
A nivel global, los puestos de trabajo en el sector de energías renovables se han disparado en 2023, llegando a 16,2 millones de empleos. Este crecimiento representa un aumento significativo respecto a los 13,7 millones registrados en 2022, destacando el sólido desarrollo de las capacidades de generación de energías como la solar fotovoltaica y la eólica. En este sentido, China lidera el sector con 7,4 millones de empleos, lo que equivale al 46% del total mundial. Le siguen regiones como Europa y Brasil, con 1,8 millones y 1,56 millones de empleos respectivamente.
España: un actor clave en la creación de empleo ‘verde’
En estos momentos, España cuenta con más de medio millón de empleos directos en el sector de las energías renovables, cifra que no deja de crecer. El informe del Ministerio del Medio Ambiente estima que las actividades principales que seguirán impulsando la creación de nuevos empleos incluyen la gestión de zonas forestales, la educación ambiental, las energías renovables, la ganadería ecológica, el tratamiento de residuos, la depuración de aguas y especialmente el I+D+i ambiental.
Este crecimiento en el empleo no solo se debe a la instalación de infraestructuras renovables, sino también a la expansión de la fabricación de equipos y la investigación en nuevas tecnologías. Las empresas en toda la cadena de suministro de energías renovables están contratando, desde técnicos especializados hasta ingenieros de diseño y expertos en almacenamiento energético.
Contrataciones de calidad y perspectivas a largo plazo
Una de las principales conclusiones del informe es que el empleo ‘verde’ se caracteriza por su calidad. A diferencia de otras industrias emergentes, en las energías renovables los puestos de trabajo son estables y a tiempo completo. Estos empleos no están limitados a trabajos temporales o estacionales, sino que ofrecen oportunidades de desarrollo a largo plazo.
En este contexto, destacar que el aumento de la demanda de técnicos especializados, operadores en remoto y expertos en redes eléctricas inteligentes se está convirtiendo en un pilar esencial para el futuro energético del país. Además, se espera que los acuerdos de compraventa de energía a largo plazo (PPAs) sigan consolidándose como un mecanismo clave para impulsar la inversión en nuevos proyectos de energías renovables, lo que generará un mayor número de empleos en los próximos años.
Iniciativas empresariales y diversidad en el empleo
Otro de los factores que está acelerando la creación de empleos en el sector renovable es el fomento de iniciativas empresariales lideradas por mujeres y colectivos tradicionalmente subrepresentados. En particular, las soluciones descentralizadas de energía ofrecen oportunidades tanto para generar empleo como para solucionar problemas de acceso a la energía en zonas remotas. En muchas áreas rurales, la instalación de paneles solares y pequeñas plantas eólicas está proporcionando una fuente de empleo local, además de contribuir a la equidad energética.
Se estima que el 32% de la fuerza laboral en energías renovables a nivel global está representado por mujeres, lo que refleja una mejora en la diversidad, aunque queda trabajo por hacer. La inclusión de más mujeres y jóvenes en el sector permitirá no solo reducir la brecha de género, sino también ampliar el conjunto de talentos disponibles.
Transición justa: un reto global
Si bien el crecimiento de la industria de las energías renovables es innegable, no todas las regiones del mundo están experimentando el mismo impulso. África, por ejemplo, sigue recibiendo solo una pequeña proporción de las inversiones globales en energía renovable, lo que limita las oportunidades de empleo en algunas áreas. Sin embargo, soluciones descentralizadas como las mini redes y los sistemas de energía fuera de red están presentando una oportunidad para reducir esta brecha.
Gilbert F. Houngbo, Director General de la OIT, ha destacado la necesidad de que los gobiernos inviertan en competencias y formación para garantizar que la transición energética sea sostenible y justa. La capacitación de los trabajadores, particularmente aquellos provenientes de industrias de combustibles fósiles, será fundamental para asegurar que nadie se quede atrás en esta transformación global.
Con políticas adecuadas de formación y educación, los países en todo el mundo podrán beneficiarse de los millones de empleos que van a seguir surgiendo de la mano de la energía limpia. En España, diversas iniciativas ya están en marcha para capacitar a los trabajadores locales en competencias clave del sector renovable.
Como parte de estas iniciativas, empresas como Endesa y otras del sector han puesto en marcha programas de formación para fomentar el empleo verde inclusivo. Estos programas no solo buscan capacitar a la población local, sino que también cuentan con un enfoque dirigido a las personas con discapacidad, permitiendo que más ciudadanos puedan acceder a oportunidades laborales de calidad en el sector. Asimismo, las energías renovables no solo están generando empleo, sino que también están ayudando en la lucha contra el cambio climático y a proteger la biodiversidad.
En estos momentos, todas las previsiones apuntan a que el crecimiento del empleo ‘verde’ continuará durante los próximos años, ya que nuevas tecnologías y políticas gubernamentales seguirán impulsando la transición energética.