Es habitual que los alumnos accedan a la universidad tras haber superado la Selectividad. De hecho, los estudiantes se preparan para una prueba exigente que supone un trámite clave en el acceso al Grado que conecta con los intereses académicos del alumno. Es decir, la selectividad supone el paso previo que, de manera habitual, forma parte del plan de acción. Sin embargo, existen otras posibilidades que puedes valorar si quieres hacer tu matrícula en la universidad y, sin embargo, deseas seguir un itinerario diferente. En Formación y Estudios exponemos otras alternativas a tener en cuenta.
La oferta de títulos de Formación Profesional proporciona una excelente preparación para aprender un oficio. Los alumnos que finalizan un grado de estas características poseen competencias y habilidades clave para buscar trabajo en un sector determinado. Sin embargo, existen muchos alumnos que, tras haber finalizado el proceso, quieren seguir estudiando. Es decir, desean adquirir un mayor grado de especialización, conectar con el mundo universitario y ampliar el currículum. ¿Existe la posibilidad de iniciar la universidad sin haber realizado la Selectividad? En ese caso, hay una alternativa que puedes valorar: finaliza un Título Superior de Formación Profesional.
Prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años
Las personas adultas tienen la oportunidad de retomar la rutina de estudio a lo largo de su trayectoria laboral. En ocasiones, no encuentran las circunstancias propicias para dedicar el tiempo necesario al estudio de diferentes materias. El horario de clases, repaso y exámenes parece difícil de conciliar con una agenda que integra otras responsabilidades.
Sin embargo, la universidad es un espacio humanista que potencia el contacto con el saber desde una perspectiva holística. Además, la universidad es un entorno intergeneracional que potencia el encuentro y el diálogo entre estudiantes que tienen realidades distintas. Existen sueños personales que pueden quedar condicionados o limitados por el edadismo.
Por ejemplo, alguien puede renunciar a su deseo de matricularse en la universidad por creer que ya es demasiado tarde para vivir la experiencia. Sin embargo, el deseo de estudiar una carrera no está determinado por una fecha límite. Por este motivo, existe otro itinerario que puedes valorar si deseas inscribirte en un Grado que te interesa porque conecta con tu vocación o tu realización profesional. En ese caso, debes preparar la prueba de acceso para mayores de 25 años.
Acceso a la universidad para mayores de 40 años
La edad no tiene una valoración negativa, sino positiva. Por ejemplo, es sinónimo de experiencia. De hecho, es habitual que una persona que ha alcanzado los 40 años haya completado una trayectoria significativa en el mercado laboral. Es decir, es probable que haya desempeñado varios puestos de empleo que le han aportado un conocimiento práctico. Posee habilidades y destrezas que incrementan su grado de empleabilidad.
Pues bien, la experiencia laboral también se valora en el proceso de acceso a la universidad para mayores de 40 años. Ten en cuenta que, aunque un profesional no tenga un título especializado, posee un saber que es fruto de tantos años de esfuerzo, responsabilidad, compromiso e implicación. Por ejemplo, ha aprendido cuáles son las competencias esenciales en un sector.
Conviene puntualizar que, en este caso, la experiencia laboral adquirida hasta la fecha debe estar en relación con la temática del Grado en el que la persona quiere realizar la inscripción.
Prueba de acceso a la universidad para mayores de 45 años
Otras personas comienzan su etapa universitaria después de los 45 años. Deben superar la prueba de acceso destinada a este grupo edad. Es esencial que estés muy atento a la publicación de la convocatoria que informa sobre la fecha en la que se desarrollará la prueba.