Cada año académico está acompañado por algunos objetivos que se convierten en prioritarios para el alumno en cada etapa. La expectativa de la selectividad puede llegar a producir vértigo a quien observa esa prueba en un horizonte más cercano.
Sin embargo, una de las claves del éxito en esta prueba es la preparación eficaz. Esta preparación también incrementa la autoconfianza en quien afronta este reto. ¿Cómo estudiar para selectividad? En Formación y Estudios te damos cinco consejos que pueden ayudarte a lograr tu objetivo.
1. Calendario de estudio para la selectividad
Uno de los errores que puede llegar a desmotivar al estudiante es acumular trabajo pendiente de realizar para otro momento. Sin embargo, la constancia se ejercita en presente, cada día. Es decir, aunque todavía queden meses para la llegada de la selectividad, tú te comprometes con el objetivo de ser tu mejor versión en esa prueba, mediante tu implicación diaria con el estudio.
Este compromiso te ayuda a llevar los contenidos actualizados y, también, a hacer un seguimiento adecuado. Este calendario de estudio debe ser realista pero, también, adaptado a las circunstancias de un alumno que necesitará dedicar más espacio a las asignaturas que le parecen más difíciles.
Este calendario de estudio es una guía básica para minimizar la improvisación y mantener una actitud proactiva en esta etapa.
2. Grupos de apoyo
Los alumnos que vayan a presentarse a la selectividad en la misma convocatoria se convierten en excelentes compañeros de viaje durante esta etapa. Son personas que se encuentran en la misma etapa, por tanto, también afrontan dudas, dificultades y obstáculos.
Cada alumno aprende a partir de su propia experiencia, pero amplía su marco de referencia cuando comparte esta información con los demás. Por tanto, mantén una comunicación cercana con otros compañeros. La tecnología ofrece distintos recursos de ayuda para mantener este contacto frecuente. Otros amigos pueden ayudarte a ti y tú a ellos.
3. Zona de estudio
Es recomendable que tengas una zona de estudio para preparar la selectividad. Una estancia con un mobiliario básico que esté perfectamente organizado para tal fin. Un escritorio amplio con espacio de almacenaje para guardar los apuntes y los libros. Es positivo que esta zona esté muy bien iluminada y sea silenciosa. Informa a tu familia de cuál será tu horario de estudio para que, en la medida de lo posible, eviten interrumpirte si no es necesario.
Ordena el escritorio y el entorno inmediato antes de sentarte en la silla para estudiar. Y ten en este lugar, únicamente, el material que necesitas en cada momento.
4. Técnicas de estudio para repasar
El repaso es fundamental durante la preparación de los exámenes. Y este repaso te ayuda a comprender mejor los distintos temas. Existen técnicas útiles para llevar a cabo este proceso. Los esquemas te permiten estructurar las ideas y conceptos principales de cada tema. El subrayado y los mapas conceptuales también te servirán en este proceso. Pero lo más importante es que utilices aquellos medios que te resulten más prácticos a ti en este periodo.
5. Exámenes de años previos
Si te vas a presentar a selectividad, tu objetivo está alineado con tu expectativa profesional de estudiar un grado concreto, en función de aquella titulación que quieras cursar. Intenta estar concentrado en este objetivo para mantener el foco de atención a lo largo de este tiempo. Pero también puedes consultar referencias del pasado para orientarte en tu plan de acción. A través de Internet, puedes consultar información sobre exámenes de años previos que te servirán de referencia para visualizarte a ti mismo en ese escenario.
En Formación y Estudios compartimos contigo estos consejos prácticos para estudiar para la selectividad.