El salto al mundo empresarial ofrece numerosas oportunidades. Pero, ante todo, es importante que el perfil tenga iniciativa para tomar decisiones en esa dirección. ¿Cómo ser empresario en un contexto competitivo? En Formación y Estudios te damos cinco consejos.
1. Busca asesoramiento especializado
Ser empresario no implica tener un conocimiento avanzado de todos los temas que forman parte de un proyecto. De hecho, es recomendable que consultes asesoramiento para cumplir con los requerimientos legales. Sí es positivo que te formes y te prepares para aplicar lo aprendido en la idea que quieres impulsar. Pero puedes trabajar en equipo con otras personas especializadas en diferentes áreas.
2. Desarrolla tu liderazgo
Un profesional que decide ser empresario pone en práctica su capacidad de influencia. Se implica para crear una empresa que ofrece productos y servicios que aportan soluciones que cubren necesidades importantes en el público potencial. El periodo de vida de una empresa que se consolida en el tiempo se afianza en el valor del esfuerzo.
El equipo debe estar perfectamente guiado por un empresario que, además, destaca como mentor. Así como tú te inspiras en aquellos que son un referente para ti, también puedes guiar a otros por medio de un liderazgo consciente. Ten en cuenta que el líder mentor es muy valorado en la actualidad. ¿Qué estilo de liderazgo quieres aprender como empresario?
3. Practica el networking
Los empresarios actuales desarrollan su carrera en un entorno cambiante y en permanente transformación. El networking aporta una red de apoyo que impulsa la creatividad y la resiliencia. Los contactos pueden dar lugar, en algún momento de la vida, a nuevas alianzas y colaboraciones. Pero, más allá de llegar a compartir un proyecto en común, el networking es una fuente de información.
Por ejemplo, otros compañeros pueden informarte sobre posibles iniciativas dirigidas a jóvenes empresarios. Las herramientas digitales te ayudan a reforzar tu marca personal cuando incrementas la visibilidad de tu currículum. Y, del mismo modo, las nuevas formas de comunicación también te acercan a otros profesionales.
4. Contextualiza el proyecto
Una iniciativa de éxito no solo requiere de alguien que la ponga en marcha, sino también de un espacio. Una empresa se desarrolla en un marco concreto que, en la actualidad, puede ser presencial u online. Las grandes ciudades ofrecen grandes oportunidades a empresarios y emprendedores.
Son lugares en los que muchas personas inician nuevos caminos. Pero es importante no olvidar la importancia que tiene el mundo rural como horizonte de inspiración. Muchos profesionales deciden marcarse objetivos empresariales que se enmarcan en núcleos pequeños situados cerca de la naturaleza.
¿En qué lugar te gustaría emprender? Analiza la viabilidad de la idea y también su capacidad de crecimiento en ese entorno. ¿Qué nivel de competencia se enmarca en el contexto?
5. Análisis DAFO
Conviene no idealizar el camino a seguir para llegar a ser empresario, puesto que las dificultades siempre surgen en el proceso. Pero tampoco es recomendable poner el foco, únicamente, en lo complejo. ¿Cómo tener una visión de contexto del lugar en el que te encuentras actualmente para avanzar hacia la meta que quieres lograr? Realiza el análisis DAFO.
¿Qué debilidades y fortalezas crees que tienes como empresario? Es importante que seas sincero contigo mismo para realizar una descripción objetiva. ¿Y qué otras oportunidades y amenazas crees que pueden irrumpir en el proceso? La aproximación a la realidad es clave para tomar las decisiones indicadas para ser empresario. Hazte las preguntas que consideres necesarias para profundizar en tu situación.
El análisis DAFO es una dinámica que puede aplicarse a propósitos diferentes. Por ejemplo, es un medio que puede ayudarte a analizar la viabilidad de una idea rentable.