Cuatro tipos de memoria para estudiar

Tipos de memoria

El recuerdo forma parte de la vida. Por medio de la memoria puedes conectar con el pasado como un tiempo asociado a momentos, objetivos, proyectos e ilusiones. La memoria también es esencial en el estudio. La memoria es muy importante y su cuidado también. En Formación y Estudios enumeramos cuatro tipos de memoria.

Memoria visual

Puedes utilizar distintos recursos para reforzar la memoria visual en la comprensión de un tema. La técnica de estudio del subrayado es un ejemplo de ello. A través de este ejercicio puedes subrayar con un color las ideas principales. Al resaltar este contenido a nivel visual, potencias el recuerdo de ese contenido.

También puedes ordenar los puntos principales del tema por medio del esquema como una herramienta que aporta una estructura ordenada a las claves del texto. Otro recurso de presentación visual es la infografía. Por tanto, la imagen es muy importante en este refuerzo de la memoria visual. Si lo deseas, utiliza mapas conceptuales. También puedes hacer anotaciones en un post it.

Algunas de las técnicas de estudio que refuerzan la memoria auditiva, a su vez, están centradas en el corto plazo. Es difícil tener una memoria fotográfica realmente precisa tiempo después del hecho que se pretende recordar.

Memoria auditiva

Por medio de los sentidos, el ser humano experimenta sensaciones y recibe información del entorno. Por medio del sentido de la vista puedes obtener la perspectiva panorámica de la imagen. A través del sentido del oído percibes los sonidos. Esta memoria auditiva también es muy importante en el estudio.

¿Cómo reforzar la memoria auditiva en el estudio? Puedes realizar el ejercicio de leer el texto en voz alta en varias ocasiones. También puedes explicar en voz alta el contenido de un tema como si estuvieses compartiendo esta información ante otra persona. También puedes realizar este ejercicio ante un interlocutor.

Esta lectura en voz alta puede formar parte del repaso de un tema. También puedes ejercitar la memoria auditiva durante el tiempo de clase. Por medio de la escucha atenta al profesor o planteando las dudas que tienes.

Memoria a corto plazo

La memoria a corto plazo es aquella que está vinculada con una información que es mantenida en un breve fragmento de tiempo. Este tipo de memoria es práctica a nivel experiencial, pero a su vez, está contextualizada a lo inmediato de un tiempo breve.

En el estudio, la memoria a corto plazo es importante. Sin embargo, la verdadera clave de la comprensión reside en la memoria a largo plazo. De este modo, al estudiar entendiendo, el estudiante no olvida lo aprendido de manera inmediata después de haber hecho el examen.

Memoria a largo plazo

La memoria a largo plazo

Incluso cuando un estudiante obtiene buenas notas a partir de un aprendizaje centrado en la memoria a corto plazo, puede llegar un momento en el que por el nivel de dificultad del curso y por las características del temario, necesite cambiar su plan de acción. Así ocurre, por ejemplo, durante la preparación de una oposición. El proyecto de estudiar el examen de una oposición se centra en el largo plazo.

Como estudiante, los objetivos de aprendizaje forman parte de tu motivación. Pero también es muy importante que alimentes el autoconocimiento y la introspección. A través de esta comprensión de ti mismo, podrás conocer mejor, por ejemplo, si eres más visual o auditivo en el estudio. De este modo, puedes incrementar la utilización de unas herramientas u otras.


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