Cuando un alumno reflexiona sobre los estudios universitarios que quiere realizar, profundiza en sus propias inquietudes personales. Es decir, alimenta su introspección si busca un itinerario que encaja en sus expectativas y preferencias. Aunque también es habitual ampliar la información desde otro ángulo distinto: las salidas profesionales y el nivel de empleabilidad que ofrece una titulación específica. En definitiva, qué oportunidades de desarrollo profesional crea en el currículum.
El conocimiento científico posee un elevado nivel de proyección en la actualidad y es determinante para potenciar la innovación. Pues bien, dicho conocimiento puede orientarse hacia diferentes campos de la realidad observable: la geología es una de las ramas que comentamos en Formación y Estudios en este artículo.
Qué estudia la geología
La geología pone una atención especial en el estudio de la Tierra desde la perspectiva de su composición, formación, historia y naturaleza. También profundiza en diferentes procesos que inciden en el estado de los materiales. La erosión es un ejemplo de ello. Esta puede estar causada por factores climáticos como el efecto continuado de la lluvia que incide directamente sobre un terreno a lo largo del tiempo. Sin embargo, el proceso también puede estar generado por la propia acción del ser humano que deja su huella. Diferentes propuestas de construcción se enmarcan en este contexto.
La geología aporta medios y herramientas clave para observar y comprender los procesos de la Tierra. También pone el acento en la identificación y cuidado de los recursos naturales (que son limitados). Un objeto de estudio que, por otra parte, también incrementa el entendimiento en torno al propio ser humano por su relación directa con el entorno que le rodea.
La geología es una disciplina que despierta el interés profesional de aquellos alumnos que se matriculan en la universidad para iniciar su proceso de formación en este ámbito. Pero la belleza de la naturaleza, en sus diferentes formas y matices, también alimenta la curiosidad de otras muchas personas (más allá de la profesión que desarrollen). Pues bien, existen libros de interés que proporcionan claves esenciales en torno al tema mencionado: ¿Para qué sirve la geología?
Es una obra que plantea en el título un interrogante muy interesante a nivel científico. El subtítulo de la obra aporta una información añadida. La publicación analiza “el idioma de las piedras”. Es un libro creado por Manuel Regueiro y Macarena Regueiro de Mergelina. Por tanto, es una lectura recomendada para todo aquel que quiere profundizar en torno a este tema.
El geólogo estudia el pasado, pero también planifica el futuro
El geólogo estudia el pasado, pero también puede realizar una previsión de próximos fenómenos. Del mismo modo, su implicación es clave para reducir el nivel de riesgo y elevar el grado de seguridad en un terreno concreto. En definitiva, su papel es esencial para potenciar la planificación en el mapa. Existen diferentes fenómenos que pueden producir consecuencias graves en un contexto. Por medio de la previsión y la anticipación, el ser humano diseña estrategias que se alinean con la protección y la seguridad de quienes se encuentran en la zona afectada.
Por otra parte, la geología también tiene una perspectiva histórica puesto que el profesional realiza un viaje en el tiempo para profundizar en la esencia de la Tierra. La profesión de geólogo dispone de numerosas salidas profesionales en la actualidad. Su conocimiento es muy demandado en distintos ámbitos, entre ellos, en el mundo de la enseñanza. Es decir, puede trabajar como docente en centros especializados. Del mismo modo, el titulado también puede adentrarse en el mundo científico por medio de proyectos que ponen el acento en hallazgos que se enmarcan en este contexto. ¿Quieres especializarte en geología para desarrollar tu carrera en este sector?