La tónica es muy famosa: hay mucha gente que decide estudiar y trabajar a la vez. Es algo que les permite, además de cursar la carrera que les gusta, costearsela sin necesidad de pedir dinero. Pero lo más interesante no es eso. Y no es de lo que queremos hablar en esta entrada. Lo que queremos comentar es la posibilidad de hacer dos cursos a la vez.
Veamos el panorama desde una perspectiva mejor. Imaginemos que estamos realizando un curso, pero que se anuncia otro que también nos gusta. ¿Sería buena idea cursar los dos? Por una parte, si, pero por otra parte nos oponemos a esto, ya que hacer dos cursos a la vez hará que nuestro rendimiento se vea perjudicado.
Debemos tener en cuenta que, al hecho de asistir a dos cursos a la vez, lo cual nos podría llevar casi medio día, tenemos que añadirle que deberemos hacer deberes, estudiar y, por supuesto, hacer los trabajos que nos manden. En definitiva, se trata de un reto sólo para los más estudiosos.
Con esto no queremos decir que no haya gente que lo haga. Sin embargo, se trata de una actividad a la que pocos se atreven a entrar, ya que supone tener mucho rendimiento durante un mínimo de cinco días a la semana. También debemos tener en cuenta el tipo de curso, ya que hay algunos que nos pedirán más, y otros que nos pedirán menos.
En definitiva, creemos que hacer dos cursos a la vez no es algo que debamos hacer en el caso de que no estemos dispuestos a invertir mucho tiempo en estudiar y realizar los deberes que nos manden. Una tarea que, en muchas casos, resultará bastante difícil.
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