Cuando se trata de oposiciones a cuerpos de seguridad, las controversias no son raras, especialmente cuando hablamos de un proceso largo y vinculado a los tribunales. En este artículo, se repasará la historia de las oposiciones a la Policía Local de Avilés que comenzaron en el año 2006, pero que debido a diversas irregularidades denunciadas, han terminado por resolverse casi cuatro años después, con la obligación de repetir el proceso selectivo.
El origen del conflicto: las oposiciones de 2006 en Avilés
En el año 2006, el Ayuntamiento de Avilés convocó unas oposiciones para proveer cuatro plazas de agente de la Policía Local. Sin embargo, las cosas no fueron tan sencillas. El Sindicato Independiente de Policía Local (SIPLA) detectó una serie de irregularidades en el proceso, las cuales fueron llevadas a los tribunales. Según el sindicato, se estaba atentando contra los principios de igualdad, mérito y capacidad que deben regir este tipo de convocatorias.
El SIPLA denunció que durante el proceso se cometieron errores graves en la corrección de las pruebas, lo que puso en duda la transparencia de todo el procedimiento. Esta situación llevó a un litigio judicial que se extendió a lo largo de varios años, retrasando la resolución de las plazas.
Sentencias judiciales y recursos: un proceso que se alargó
Ya en una primera sentencia, los juzgados dieron la razón al sindicato, pero el Ayuntamiento de Avilés recurrió el fallo inicial, lo que prolongó aún más el proceso. Finalmente, el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) emitió una sentencia definitiva en la que se confirmaban las irregularidades y se ordenaba repetir la oposición para las cuatro plazas de la Policía Local. Sin embargo, a lo largo del procedimiento aparecieron obstáculos que complicaron aún más la situación.
Una situación similar se ha vivido en otras ciudades de España. Por ejemplo, en Sevilla, las oposiciones a la Policía Local de 2012 sufrieron un proceso judicial que también derivó en la obligación de repetir el examen tras haberse detectado la filtración de pruebas. Este caso, al igual que el de Avilés, muestra cómo los tribunales pueden intervenir en procesos selectivos para garantizar su legalidad.
Implicaciones para los opositores y el Ayuntamiento
La obligatoriedad de repetir las oposiciones supuso un duro golpe para los aspirantes que habían aprobado inicialmente, algunos de los cuales ya estaban trabajando en sus nuevos puestos como agentes. Tener que volver a someterse a las pruebas fue una situación difícil tanto para ellos como para el Ayuntamiento, que se vio obligado a enfrentar el coste económico y organizativo de repetir el proceso. Asimismo, quedan en evidencia las dificultades legales que puede enfrentar una entidad pública cuando no sigue escrupulosamente los procesos de selección.
En el caso concreto de Avilés, estos años de enfrentamientos entre el SIPLA y el Ayuntamiento no solo han afectado a la imagen del gobierno local, sino que además han generado una situación de incertidumbre laboral para los agentes que lograron superar con éxito las pruebas.
El caso de las oposiciones en otras localidades
Lo ocurrido en Avilés no es un hecho aislado. A nivel nacional, existen varios casos en los que las oposiciones a cuerpos de seguridad locales han sido objeto de controversia y litigios judiciales. Por ejemplo, en Sevilla, en el año 2012, un juzgado anuló las oposiciones para la Policía Local, ordenando repetir parte del proceso tras la sospecha de que se habían producido irregularidades en las pruebas. En este caso, la filtración de un examen teórico afectó a 44 agentes que, aunque ya estaban trabajando, debieron volver a presentarse.
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 7 de Sevilla, encargado de este proceso, determinó que había pruebas suficientes para considerar que algunos opositores habían tenido acceso a la plantilla de corrección del examen con anterioridad, lo que rompía los principios de igualdad, mérito y capacidad que deben regir los procesos selectivos. Estos casos, tanto el de Sevilla como el de Avilés, muestran cómo el sistema de selección de personal en las fuerzas de seguridad puede verse gravemente afectado por irregularidades que ponen en entredicho la transparencia de los concursos públicos.
Nuevas convocatorias y rejuvenecimiento de la Policía Local
En contraposición a estos problemas legales, en los últimos años, la Policía Local de Avilés ha vivido una fase de rejuvenecimiento en su plantilla. Desde la aplicación del coeficiente reductor para la jubilación, que se equiparó al de otros cuerpos de seguridad, se han producido numerosas jubilaciones. Entre 2019 y 2022, se retiraron un total de 39 agentes, lo que obligó al Ayuntamiento a realizar una serie de nuevas convocatorias para cubrir las vacantes.
En una de estas convocatorias más recientes, dedicada a proveer tres plazas de agente, aproximadamente 200 personas se inscribieron para participar. Posteriormente, tras una primera fase de selección, el número de aspirantes se redujo a noventa, quienes se enfrentaron a las últimas pruebas en noviembre de ese mismo año.
El procedimiento ha permitido que en los últimos dos años se hayan incorporado once nuevos policías a la plantilla de la ciudad, que había visto cómo el número de efectivos se reducía a 92 agentes en el año 2020. Actualmente, la Policía Local de Avilés cuenta con 103 agentes, y se espera que este número siga aumentando con la incorporación de nuevos efectivos que están finalizando su formación en la Escuela Regional de Policía de Asturias.
Perspectivas para el futuro: más plazas y rejuvenecimiento del cuerpo
La idea del Ayuntamiento de Avilés es seguir reforzando la plantilla policial, dentro de los límites administrativos y de la tasa de reposición permitida. A la incorporación de los tres nuevos agentes previstos se les sumará uno más, que llegará a través de un proceso de movilidad entre policías locales de Asturias, cuya convocatoria está planeada para los próximos meses. Además, se espera que el cuerpo siga creciendo y rejuveneciéndose, como parte del esfuerzo por mejorar la presencia policial en la ciudad.
Los problemas judiciales y las dificultades en la convocatoria de plazas en Avilés no son más que un reflejo de lo que ha venido ocurriendo en muchas otras localidades españolas. La Policía Local de Avilés sigue en proceso de renovación, enfrentando los desafíos de la administración pública en la contratación de nuevos agentes, pero también buscando garantizar la transparencia de los procesos y evitar futuros litigios judiciales.
Sin duda, la repetición de oposiciones no es algo exclusivo de Avilés ni de las fuerzas de seguridad. Sin embargo, estos casos resaltan la importancia de seguir criterios claros y transparentes en los procesos de selección pública, protegiendo los principios de igualdad, mérito y capacidad, y asegurando la limpieza en la contratación de empleados públicos.
En vista de este caso y otros similares, para futuros aspirantes a plazas en la función pública, resulta fundamental la garantía de que los procesos estarán dirigidos de manera honesta y con la máxima transparencia, asegurando así que aquellos que logren obtener una plaza lo hagan por su mérito y capacidad, sin la influencia de irregularidades o favoritismos.