Últimamente se ha puesto muy de moda un término que mucha gente ejecuta casi a diario. Sobre todo cuando hay cansancio. ¿Conocéis la palabra procrastinar? Aunque no la hayáis escuchado, estamos seguros de que la habréis realizado en alguna ocasión de vuestra vida. Y es que procrastinar significa dejar las cosas para después, es decir, aplazar unas actividades por otras.
En muchas ocasiones, cuando teníamos que estudiar y estabamos cansados o no teníamos ganas, lo dejábamos para después. Es decir, sustituíamos esa actividad por otra. Algo que no es recomendable, ya que necesitaremos estudiar con el fin de memorizar o aprender los contenidos que tengamos que poner en próximos exámenes, o simplemente que tengamos que aplicar.
La verdad es que no hay unos motivos exactos por los que hagamos esto. Algunas veces es porque no tenemos ganas, y otras porque no tenemos tiempo. El caso es que procrastinar es algo más habitual de lo que parece. Por supuesto, existe una solución muy sencilla: la voluntad. Y es que, si tenemos que hacer algo, lo recomendable será hacerlo a la hora que tengamos programada. De esta forma, podremos dejar terminada la tarea y descansar el tiempo restantes, si podemos.
En definitiva, procrastinar es algo más realizado de lo que parece en un principio, por lo que os recomendamos que os familiaricéis con la palabra y, por supuesto, hagáis las tareas que tengamos que realizar a su debido tiempo. No sólo podréis tener un horario más holgado. También obtendréis mejores resultados que si hiciérais lo contrario.
Más información – El respeto de los horarios
Foto – Wikimedia
Sé el primero en comentar