El interés por la lectura puede llegar a convertirse en una profesión puesto que existen diferentes labores profesionales que giran en torno al mundo del libro. Existen figuras que son universalmente conocidas como, por ejemplo, los escritores, los bibliotecarios, los emprendedores que montan su propia librería… También destaca el trabajo desarrollado por los críticos literarios que comparten con el público una valoración profesional de las obras que comentan por medio de reseñas especializadas. Reseñas que van más allá de una opinión subjetiva puesto que están respaldadas con argumentos y datos que muestran el conocimiento experto del autor.
Sin embargo, hay figuras más desconocidas en torno al mundo del libro. El papel del lector editorial es muy importante, puesto que el informe que realiza sobre una obra antes de ser publicada, influye en la decisión final que la editorial toma respecto al futuro de esa publicación. El lector editorial presenta un informe detallado sobre la obra. ¿Qué es un lector editorial y cuál es su labor?
Qué es un lector editorial y cuál es su labor: su figura es clave para valorar la calidad de una obra
Actualmente, el mundo editorial ha evolucionado puesto que se publican un elevado número de libros cada año y, además, surgen nuevas iniciativas como la autopublicación. Generalmente, antes de dar ese paso, el autor de un libro contacta con diferentes editoriales para presentar su propuesta. A su vez, el lanzamiento de un libro también se alinea con una expectativa concreta: la venta. Por ello, existen distintas iniciativas que influyen en la visibilidad de la obra: el acto de presentación del libro, las firmas de ejemplares, la asistencia del autor a diferentes eventos literarios, las acciones de marketing…
Sin embargo, las editoriales reciben muchas propuestas y deben seleccionar no solo aquellas que pueden llegar a ser un éxito literario, sino también aquellas obras que mejor encajan con la esencia del medio. ¿Cómo saber si una obra puede llegar a conectar con el público objetivo? ¿Cómo tener la certeza de que una propuesta destaca por su coherencia interna y su calidad? ¿Qué aspectos destacan de una obra y qué otros detalles pueden mejorarse? Son muchas las preguntas que sirven para profundizar en torno a un libro (en forma y contenido).
¿Y qué figura influye de forma decisiva en la valoración inicial de una obra?
El lector editorial es un profesional especializado que aborda la lectura de la obra desde una perspectiva diferente a la de otros lectores que disfrutan de este hábito durante su tiempo libre. Su valoración final de la obra queda recogida en un informe completo.
En consecuencia, el trabajo de un lector editorial no solo se relaciona con la lectura profesional, sino también con la escritura. Por ello, es una labor que también le permite desarrollar una faceta creativa. Ten en cuenta que la calidad de un informe también puede reflejar el dominio del lenguaje, las habilidades de comunicación y la atención al detalle que acompañan a la minuciosa labor de presentar un buen trabajo.
El trabajo de lector editorial es complejo y exigente
De hecho, debe contar con un amplio conocimiento en torno a autores, estilos, temas, recursos estilísticos, géneros… Como hemos comentado, un buen informe proporciona información altamente especializada, no se reduce a una opinión personal y subjetiva. El documento que presenta influye en la posible publicación de una obra o en la alternativa contraria si el manuscrito no cuenta con la calidad necesaria para ello.
¿Y cómo discernir con claridad qué propuesta puede llegar a ser un éxito a partir de sus características principales? El criterio de un lector profesional es muy valorado por las editoriales. Si te gusta la lectura y quieres trabajar en una profesión vinculada con los libros, esta propuesta puede interesarte.