El síndrome del trabajador quemado produce mucho malestar en el trabajador. Todos hemos estado en este punto en algún momento. Sin embargo, esta sensación de estar quemado puede ir de mayor a menor gravedad. ¿Qué soluciones puedes poner en práctica frente al síndrome del trabajador quemado?
1. Cambiar de trabajo
En ocasiones, esta es la mejor opción. Así ocurre cuando tienes la sensación de estar haciendo un trabajo que te aburre y que ya no te aporta un mayor crecimiento. Sin embargo, si en tu interior tú aspiras a evolucionar en tu carrera, y visualizas unas competencias que no puedes poner en práctica en este empleo, entonces, busca otro trabajo. Si quieres salir de esta etapa de estancamiento tienes que asumir riesgos. De lo contrario, seguirás en la misma situación durante mucho más tiempo. Es cierto que el apego a lo conocido produce seguridad, sin embargo, también produce mucha insatisfacción.
2. Relaciones presenciales
El contexto laboral actual está marcado por la comunicación digital. Sin embargo, para revitalizar tu mente es muy importante que fomentes los planes y los momentos compartidos con personas en vínculos presenciales. Puedes fomentar los entornos presenciales en torno a lo laboral a través del networking y la formación. Pero integra estos planes también en tu vida personal.
3. Haz un viaje cultural
Este es un buen momento para organizar un fin de semana de turismo cultural. Es decir, concreta un destino en el que puedas disfrutas de la arquitectura, el arte, la cultura y el patrimonio artístico de ese lugar. Y durante tu viaje, reduce el contacto tecnológico. Para fomentar la introspección durante esta escapada, puedes asumir el reto de escribir un diario de viaje, por ejemplo.
Si te apetece encontrar unos días para pensar, también puedes viajar al pueblo. Un contexto de tranquilidad en el que fomentar el contacto con la naturaleza, desconectar de la tecnología y conectar con el estilo de vida rural. A veces, el síndrome del trabajador quemado es la suma del agotamiento. Por esta razón, un descanso puede ser tan apetecible.
4. Dónde quieres estar
Si te sientes quemado en tu profesión, eso significa que no estás en el punto que deseas. No estás en el lugar en el que de verdad anhelas. Sin embargo, el conflicto se produce cuando la persona no ha concretado realmente sus expectativas. Si quieres encontrar una solución frente al síndrome del trabajador quemado es muy importante que reflexiones sobre tu punto ideal.
Reflexiona sobre dónde quieres estar, siendo sincero contigo mismo. Esto es una premisa esencial. Es decir, deja de lado el miedo que puede ser un freno cuando te quedas estancado en el círculo de siempre. ¿Dónde quieres estar? ¿Y por qué quieres llegar hasta allí? ¿Dónde te gustaría estar si no tuvieras miedo?
5. Ayuda psicológica
El síndrome del trabajador quemado produce tanto desgaste a nivel mental que la ayuda psicológica puede ser determinante para que el profesional desarrolle nuevos recursos de resiliencia para gestionar esa situación incómoda. La realidad es una pero tú puedes desarrollar distintas fórmulas de posicionamiento ante ese hecho. No solo puedes recibir apoyo psicológico en una terapia especializada, sino también, en un taller de crecimiento personal.
6. Practicar deporte
El deporte es un ejercicio de bienestar para el cuerpo y la mente. La terapia del deporte puede ser muy saludable frente al síndrome del trabajador quemado porque gracias a la consecución de nuevos objetivos puedes motivarte y descubrir tu potencial.
7. Ejercicio de empatía
Imagina que esta situación laboral que te afecta la está viviendo en realidad un amigo al que tú deseas que sea feliz en el entorno laboral. ¿Qué consejo darías a esa persona? Reflexiona y después, pon en práctica este consejo. Actualmente puedes disfrutar en cine de la película «La Llamada». Una cinta que con la propuesta del humor invita al espectador a seguir su vocación.