Seguro que os habéis encontrado en esta situación en más de una ocasión: puede que los profesores exigan mucho rendimiento de vosotros. Cuando esto se acumula con las demás asignaturas, es evidente que podría llegar a provocarnos inconvenientes en la cantidad de tiempo de que disponemos. Y eso provoca, también, más de un error.
Pero no sólo tenemos que hablar de tiempo o de exigencias. También tenemos que comentar que no todos los alumnos sin iguales. Cada uno tiene su propio estilo, lo que significa que habrá algunos que comentan más errores, y otros que cometan menos. Es algo completamente normal. No hay ningún alumno que haga todas las asignaturas de manera perfecta. Siempre habrá algún fallito, por mínimo que sea.
Esto es algo que los profesores tendrán que comprender. Por mucho que quieran pedir de sus alumnos, es evidentes que habrá una serie de errores que tendrán que asumir, pero que podrán solucionar en la medida de lo posible. Por ello, que no les resulte extraño si existen convocados que saquen notas suficientes, o que incluso no aprueben. Es en ellos en los que más se tendrán que fijar con el fin de intentar mejorar sus notas.
Recordad lo que os hemos dicho: no somos perfectos. Todos tenemos nuestros fallos. Unos más, otros menos. Sin embargo, en nuestra mano también queda el hecho de intentar solucionar los mismos y mejorar todo lo que nos sea posible. Estamos seguros de que si hacemos los esfuerzos suficientes podremos llegar a conseguir un buen rendimiento. ¿Qué pensáis vosotros?