Una de las cosas más populares que tenemos en España, aparte de lo ya típico, es la siesta. Esta actividad se basa en el hecho de dormir un poquito después de comer. Sería como hacer un descanso entre jornada y jornada que nos permita recuperar fuerzas con el fin de poder trabajar mejor. Y una de las cosas más curioso que giran en torno a ella es el hecho de que se practica, sobre todo, durante el verano.
Sin embargo, no estamos aquí para definir con exactitud lo que es la siesta, sino para comentar los beneficios que puede traer a nuestro cuerpo y a nuestra carrera estudiantil. Imagináos que estáis toda la mañana estudiando, en clase. Aprendiendo nuevas cosas que, evidentemente, nos irán cansando cada vez más. Cuando lleguéis a casa durante el mediodía, estamos seguros de que querréis descansar un poco. Y una de las mejores cosas que podéis hacer después de comer es echaros una siesta.
Echarse la siesta es dormir, pero menos tiempo del que se hace habitualmente. Si normalmente dormimos entre 7 y 9 horas, en una siesta tendremos la oportunidad de dormir alrededor de 30 minutos. Al menos, eso es lo que aconsejan los especialistas para que nuestro cuerpo descanse. Incluso, avisan de que si la siesta es de mayor duración, podríamos levantarnos más cansados.
En nuestra opinión, os recomendamos que os echéis una siesta siempre que podáis. Si miráis a las personalidades más famosas, descubriréis que en ocasiones realizaban microsiestas gracias a las cuales recuperaban fuerzas. De esta manera, en general dormían menos y trabajaban más.