Temarios oposiciones

Has decidido estudiar una oposición. Por lo que ya tenemos una idea clara sobre nuestro futuro. Pero ahora llega otra parte fundamental que es decantarnos por una. Necesitamos sentir esa vocación que nos indique por qué rama tirar. Además de ello, pensar en los títulos que tengamos, porque como bien sabemos, es uno de los grandes requisitos.

Una vez que ya tengamos en mente la oposición que nos gusta o que nos motiva, necesitamos comprar el temario. Podemos hacernos con él ya mismo, por eso, a continuación encontrarás los temarios de las oposiciones que más salidas laborales tienen ahora mismo.

Oposiciones más demandadas

Temarios Correos

Oposiciones de Correos
Temarios Correos
Temario de bomberos

Oposiciones de Bomberos
Temarios Bomberos
Temarios Guardia Civil

Oposiciones de Guardia Civil
Temarios Guardia Civil
Temarios SAS

Oposiciones SAS
Temarios SAS
Temarios Justicia

Oposiciones de Justicia
Temarios Justicia
  • Oposiciones Guardia civil: Una de las oposiciones más demandadas es la de Guardia Civil. Los cuerpos de seguridad siempre están entre las más solicitadas. Unas oposiciones cuyo requisitos principales es contar con el título de ESO, tener 18 años y no más de 40. Su examen se divide en pruebas físicas (velocidad, resistencia, natación…) y la parte teórica (Ortografía, idioma, psicotécnicos y entrevista personal).
  • Oposiciones para Bomberos: Para poder presentarte a estas oposiciones de bombero necesitas el título de Bachiller o equivalente, así como tener 16 años. El examen también está compuesto por una parte teórica y su parte práctica (Trepa de cuerda, levantamiento de peso, flexiones, carrera, natación y salto vertical). Los psicotécnicos y el reconocimiento médico completan las partes que hay que superar. Una vez que tengas tu plaza, realizarás trabajos muy variados como evacuaciones, emergencias o extinción de incendios.
  • Oposiciones SAS (Servicio Andaluz de la Salud): Aquí contaremos con varios puestos y cada uno de ellos tendrán sus requisitos en forma de titulaciones. Entre todos ellos destacamos los administrativos, celadores, técnicos de farmacia o fisioterapeutas, entre otros. En cuanto al examen, constará de la parte teórica y de un supuesto práctico, sin olvidarnos de la fase de concurso, donde se irán sumando los méritos obtenidos.
  • Oposiciones de Correos: Como requisitos, necesitarás el título de ESO o su equivalente y haber cumplido ya los 18 años. Para el examen, tendrás que pasar una prueba denominada común y dos específicas, donde también los psicotécnicos son protagonistas. Dentro de estas oposiciones, también nos encontraremos con diferentes puestos (Personal ejecutivo, oficial, de clasificación, reparto o ayudantes). Además, cuentan con una Bolsa de Trabajo que te permite ir accediendo a diferentes empleos mientras esperamos por nuestra plaza.
  • Oposiciones de justicia: Dentro de las oposiciones de Justicia nos encontramos con tres cuerpos bien diferenciados. El de Gestión Procesal para el que se requiere una diplomatura o título universitario, luego tenemos el cuerpo de Tramitación Procesal donde se necesita el título de Bachiller. Finalmente, el cuerpo de Auxilio Judicial para el es válido la titulación de ESO o similar. Una vez aprobada tu oposición podrás acceder a la promoción interna. Los trabajos a desempeñar con un tanto diferentes, pero todos ellos se realizan entre fiscalías y oficinas de tipo judicial.

Ventajas de ser funcionario

Funcionario que ha estudiado una oposición

La administración pública convoca puestos de trabajo, para los cuales, numerosas personas se preparan durante meses o años. Un gran esfuerzo que merece la pena, ya que una vez que se pasa la oposición, tendremos numerosas ventajas de ser funcionarios.

  • La seguridad de un puesto fijo: El trabajo es una parte imprescindible de nuestra vida. Gracias a él, podremos obtener un sueldo que nos permita vivir con ciertas comodidades. Por lo que ser funcionario nos indica esa seguridad. Cada mes recibiremos nuestro salario, además de un par de pagas extra cada año. En este terreno los despidos no son frecuentes, por que puedes seguir trabajando hasta que te llegue la edad para jubilarte.
  • Unas merecidas vacaciones: Todo trabajo también tiene que contar con el período de las vacaciones. Es cierto que no siempre es así, dependiendo del tipo de trabajo. Además, en muchos casos los días de descanso se reducen de manera notable. Por lo que otra de las ventajas de ser funcionario es tener más días de vacaciones.
  • Los horarios: Es cierto que tienes que respetar una serie de horarios, tanto de entrada como de salida. Pero en este caso, no es frecuente que te quedes más tiempo del que debes. Mientras que en otros muchos trabajos sí corremos esa suerte de que nos digan que tenemos que terminar algún que otro tipo de papeleo. Además, en la gran mayoría de los puestos, tendrás una pausa para poder tomarte un café.
  • Mejoran los derechos del trabajador: Sin duda, los derechos del trabajador tienen un gran cambio entre los funcionarios. Temas como la jubilación así como la cotización, etc, siempre son puntos inamovibles y respetados.
  • Concurso de traslados: Es cierto que también supone una gran ventaja para la gran mayoría de los puestos ofertados. Es decir, tendrás movilidad geográfica, si así lo deseas. Aunque no será a dedo, sino por medio de la fase de concurso. Quizás para los profesores sí es un tanto más complicado, pero aún así se puede considerar como una buena ventaja a tener en cuenta.

Tipos de oposiciones 

Los tipos de oposiciones o de empleados públicos son solamente cuatro, dependiendo de los requisitos, el trabajo en sí y de los puestos.

  • Funcionario de carrera: Lo solemos conocer simplemente como funcionario. Es la persona que está vinculada a la Administración Pública. Es decir, se trata de un puesto fijo tras haber pasado una oposición y obtenido una plaza. Dentro de este tipo de funcionarios, nos encontramos con una clasificación, según los títulos que se les han exigido.
    • Grupo A: El primer grupo, se puede dividir también en A1 y en A2. Tanto en uno como en el otro, vas a necesitas de una titulación universitaria para poder presentarte a dichos puestos.
    • Grupo B: Para acceder a las oposiciones el Grupo B, necesitas el título de Técnico Superior.
    • Grupo C: Aquí también nos encontraremos con las denominadas C1. En ellas se exige el título de Bachiller, mientras que para las C2, se necesita el título de Graduado en ESO.
  • Funcionarios interinos: A pesar de haberse preparado también las oposiciones, se diferencia de los anteriores porque sus trabajos no son igual de estables. Eso sí, las funciones del trabajo que tienen que realizar sí serán idénticas a las de los funcionarios de carrera. Pero los interinos aparecen cuando hay exceso de trabajo o quedan algunas plazas vacantes que hay que cubrir o se trata de una sustitución.
  • Personal laboral: Cuentan con un contrato que viene de la Administración Pública. Dicho contrato puede ser indefinido, permanente o temporal.
  • Personal eventual: En este caso hablamos de un trabajo que suele estar destinado a el asesoramiento y como su nombre indica, es algo temporal.

Quiero estudiar una oposición, ¿cómo empezar?

Chica estudiando los temarios de una oposición

A continuación tienes una serie de consejos para empezar a estudiar una oposición y no morir en el intento:

  • Tendrás que establecer siempre unos horarios fijos de estudio. Porque las rutinas siempre son la base de un equilibrio y de motivar a nuestro cuerpo.
  • Comienza estudiando poco a poco. Recuerda que unas oposiciones llevan su tiempo y es mejor tomarlo con calma si queremos un buen resultado. Eso sí, en este caso, cada uno puede marcarse sus metas. Lo aconsejable es comenzar con poco tiempo, tan solo unos minutos pero bien concentrados. La concentración siempre es la clave para un buen aprendizaje.
  • Recuerda siempre tu motivación. Si has llegado hasta aquí se supone que es porque lo has pensado, has reflexionado sobre las cosas buenas que te dejará el haber aprobado una oposición. Así que cuando no tengas ganas, recuerda siempre la motivación y el visualizar el objetivo.
  • No te preocupes si un tema no te ha estado retenido como esperas. Porque si te centras solo en este tema, harás que pierdas mucho tiempo y ganas. No todos los temas tienen que ser tan duros, no te exijas tanto en algo que tiene solución.
  • Las oposiciones son como si de un trabajo se tratara. Cierto es que en un primer momento no está remunerado, pero debemos tomárnoslo así. No te agobies a la primera de cambio, organízate y no te satures demasiado.
  • Hay gente que comienza estudiando unas tres horas al día durante el primer mes. Pero como hemos indicado, puede haber descansos, pero siempre mucha concentración. Luego, al mes siguiente, podrás ampliar tu jornada de estudio.
  • Cada cierto tiempo, no está de más que hagas algún tipo de examen a modo de simulacro. Así tendrás un cierto contacto con lo que te vas a encontrar cuando llegue el gran día, y pondrás a prueba tus conocimientos.
  • Recuerda que primero es aconsejable leer, luego subrayar lo más importante y hacer resúmenes para fijar los conceptos.

¿Es difícil aprobar una oposición?

No es una pregunta sencilla para responder. Más que nada porque dentro de la dificultad también entran diferentes puntos. Uno de ellos es el tipo de oposición al que nos presentemos, así como su escala dentro de los Grupos A, B o C. Por otro lado, estará el tiempo que le dediquemos, ya que se necesita bastante constancia y trabajo, así como organización.

Por todo ello, hay que tener en cuenta que muchas personas se pasan años antes de aprobar. Pero de lo que se trata es de lo rendirse, de enfocar el objetivo e ir a por él. Aunque sea con pequeños pasos, pero siempre se puede. Nos encontramos con testimonios de todo tipo, donde algunos resumen que sí ha sido complicado, mientras a otros no les ha resultado para tanto como se describe. Así que como decimos, dependerá de la persona, de sus métodos de trabajo y de su tesón.

Cuánto cobra un funcionario

Funcionario estudiando

El sueldo de un funcionario viene determinado por el grupo al que ha opositado. Pero además, se suman algunos otros factores como pueden ser el destino o bien, la antigüedad en el puesto. Pero a grandes rasgos los salarios son los siguientes:

  • Grupo A1: Su sueldo cada mes supera los 2.800 euros. En este grupo se encuentran inspectores de trabajo, seguridad social, hacienda o cuerpos superiores de la Administración del estado.
  • Grupo A2: En este caso el sueldo desciende hacia los 2.200 euros al mes y dos pagas extra. En este grupo, nos podemos encontrar funcionarios técnicos de auditoría, de hacienda o gestión de sistemas así como de informática.
  • Grupo B: Si dispones de un título Técnico Superior, podrás acceder a este grupo. En cuanto a su sueldo, rondará los 1.800 euros.
  • Grupo C1: El cuerpo administrativo suele situarse en este grupo. Para poder presentarte, necesitarás el título de Bachiller. El sueldo se sitúa entre los 1.600 euros.
  • Grupo C2: Aquí nos encontraremos con el cuerpo auxiliar, que como requisito fundamental necesitará el título de ESO. Cobrarán sobre los 1200 euros.
  • Grupo E: El personal subalterno contará con un sueldo aproximado de 1000 euros.

¿Qué pasa si suspendo el examen de la oposición?

 Es cierto que después de todo el tiempo empleado, del esfuerzo, ver que se ha suspendido es bastante frustrante. Así que, debemos intentar asumir lo que ha pasado, aunque no sea fácil. Los días siguientes, se aconseja descansar y disfrutar. Es el momento para darnos un tiempo de reflexión y olvidarnos de todo en la medida de lo posible.

Hay que mirar el lado positivo. Porque todo ello se trata de un aprendizaje y cada vez estaremos más cerca de nuestro objetivo. Lo que nos añade más experiencia para la siguiente ocasión en que nos presentemos. Ahora bien, suspender el examen de la oposición, no es el fin. Es una manera de poder descubrir los errores y mejorar las técnicas para tomar el siguiente examen de manera más optimista.