En esta recta final de año, llega el momento de hacer balance de los objetivos profesionales alcanzados. Pero, a su vez, el inicio de un nuevo año también viene acompañado por la motivación de los nuevos propósitos laborales. Buscar trabajo es un propósito que no solo puede ser la consecuencia de un periodo de desempleo, sino también, de un anhelo de mejorar las condiciones laborales. ¿Cuáles son las competencias básicas para buscar trabajo? En Formación y Estudios enumeramos cinco puntos:
1. Actitud proactiva
El factor suerte puede interpretarse desde dos puntos de vista. En relación con las circunstancias ajenas a tu voluntad, sientes que la fortuna se pone de tu parte cuando los acontecimientos te resultan favorables. Sin embargo, la verdadera suerte es aquella que parte de una actitud proactiva en la que tú actúas como protagonista siguiendo el plan de búsqueda de empleo que te habías marcado.
Una actitud proactiva que es contraria a esta tendencia que te lleva a posponer metas para otro momento. Muestras esta actitud proactiva cuando presentas tu autocandidatura a empresas en las que te gustaría trabajar. Con esta forma de actuar inviertes en tu futuro a través de tu presente.
2. Formación continua
Una disposición hacia el aprendizaje que no solo parte de la asistencia a cursos, congresos y conferencias, sino también, del aprendizaje autodidacta a través de la lectura de libros, por ejemplo.
Esta formación continua incrementa tus competencias y habilidades. Por tanto, con este proceso de capacitación constante también incrementas tu empleabilidad.
3. Competencias digitales
El protocolo de búsqueda de empleo ha evolucionado con las nuevas tecnologías. Actualmente, el envío del currículum a través del correo electrónico o la búsqueda de ofertas a través de bolsas de empleo online, marca la tendencia que deja en un segundo plano el formato tradicional del correo postal.
Las competencias digitales también se reflejan a través de la importancia del cuidado de la marca personal por medio de la optimización de recursos digitales como Linkedin, un blog o una página web.
4. Networking
Lo más determinante no es el número de contactos sino la gestión de dicha agenda de networking que pone en valor la posibilidad de establecer alianzas de colaboración. Si, por ejemplo, informas a tus contactos de que estás buscando trabajo es probable que algunos de ellos puedan informarte sobre posibles oportunidades profesionales, cursos de formación, recursos digitales o branding.
5. Comunicación
El conocimiento de un segundo idioma es muy valorado. El inglés es un buen complemento del currículum. Sin embargo, las habilidades de comunicación también son determinantes en tu idioma nativo. La comunicación escrita es visible en el mismo instante en el que envías un currículum a una empresa, también demuestras tus habilidades en la superación de las pruebas del proceso de selección, en una entrevista de trabajo a través del teléfono o en cualquier interacción con la empresa.
Por tanto, a través de estas cinco competencias incrementas tu nivel de empleabilidad en el mercado laboral actual. ¿Qué otras competencias crees que conviene añadir a esta lista de propuestas?