Cada profesional se especializa en una disciplina específica que es aquella que acredita su formación en una titulación. Pero el aprendizaje no solo está en el aula, sino que el descubrimiento también forma parte de un viaje.
Existen distintos tipos de escapadas, aquellas que tienen un componente cultural siempre son tendencia. Con la proximidad de las próximas vacaciones de Semana Santa, tal vez te apetezca organizar una escapada de descanso durante algunos días. En Formación y Estudios te contamos cuáles son estas ventajas de los viajes culturales.
1. Descubre museos emblemáticos
Actualmente, puedes conocer información sobre distintos museos a través de la página web de cada espacio cultural. Algunos de estos museos también ofrecen al visitante la oportunidad de realizar una visita virtual. Los viajes culturales te permiten experimentar este encuentro con el arte a través del legado creativo de distintos artistas.
Museos que, a su vez, también destacan por su arquitectura. Por ejemplo, si visitas el Centro Botín en Santander podrás deleitarte con la imagen de postal de un edificio mirando al mar. Durante un viaje también tienes la oportunidad de aprender del conocimiento de otros expertos. Por ejemplo, un guía turístico acompaña al visitante en el descubrimiento de una colección de arte expuesta en las salas de un museo.
2. Una inversión de conocimiento
Cuando organizas una escapada cultural te estás dedicando un tiempo valioso a ti mismo ya que esta escapada va a alimentar tu mente y tu corazón con nuevos descubrimientos, nuevas ideas y más vivencias que expanden tu zona de confort con la referencia de este viaje en el que habitas el presente como protagonista. Durante un viaje cultural tú adoptas un rol protagonista en esta escapada.
Durante estos viajes culturales también tendrás la oportunidad de conocer espacios que han sido un centro fundamental del conocimiento. Por ejemplo, la Universidad de Comillas en Cantabria ubicada en un entorno de naturaleza que te sorprende, además, por la belleza de su estética interior.
En la Oficina de Turismo de cada localidad puedes obtener un documento informativo con los puntos de interés, los monumentos más destacados y otras sugerencias que puedes añadir a tu viaje.
3. Un viaje a través de la historia
No es posible viajar de forma literal a través del tiempo, pero sí es posible realizar este recorrido visual a través de las expresiones de cultura que forman parte de un viaje cultural. Por ejemplo, la pintura, el arte, la arquitectura, la escultura, las corrientes artísticas, aquellos acontecimientos que influyeron en la configuración de un espacio… Realizas un viaje a través de la historia que tú completas con tu propio presente.
En este viaje a través de la historia también puedes observar cómo algunos edificios han ido evolucionando a lo largo del tiempo. Imagina, por ejemplo, aquellos castillos que en la actualidad tienen una nueva función. Algunos castillos se han convertido en alojamientos; hoteles que dan la bienvenida a quienes descansan allí durante un viaje. El Palacio de la Magdalena situado en la ciudad de Santander es el escenario en el que se celebran durante el periodo estival los Cursos de Verano de la Universidad Menéndez Pelayo.
4. Un viaje en soledad o en compañía
Esta es otra de las ventajas de este tipo de turismo ya que tendrás la oportunidad de disfrutar de esta experiencia tanto si programas una escapada en soledad como si lo haces en compañía. Durante tu viaje tendrás la oportunidad de escribir un diario con algunas de las anécdotas y detalles de esta experiencia. También podrás conservar el recuerdo de los lugares que has visitado al añadir algunas fotografías.
¿Qué otras ventajas de los viajes culturales quieres sumar a este artículo en Formación y Estudios?