Son muchas las decisiones que una persona toma a nivel profesional para dirigir sus pasos en su carrera laboral. Muchas personas se preparan con esfuerzo para presentarse a una oposición.
Esta es una decisión exigente y es muy importante que la persona valore cuándo se encuentra en un buen momento para lograr este propósito a nivel de compromiso y motivación. La decisión de opositar es compleja porque no solo existen beneficios sino también inconvenientes. En Formación y Estudios reflexionamos sobre este tema en este artículo.
Desventajas de opositar
Tener una visión de los pros y los contras es una buena medida para tener una visión completa de esta situación:
1. Tiempo de estudio. Muchas de estas horas se restan del tiempo libre y los planes con los amigos. Es cierto que el esfuerzo compensará a largo plazo, sin embargo, es un esfuerzo importante a corto plazo.
2. Incertidumbre. Cuando una persona prepara una oposición no tiene la certeza absoluta de que el resultado de la prueba sea el previsto. Puede ocurrir que las horas de estudio no ofrezcan los resultados esperados.
3. Dificultades de gestión del tiempo. Si concilias este tiempo de estudio con un horario laboral, también experimentarás las dificultades de la conciliación.
4. Dificultades de concentración. No todos los días son iguales en la vida de un opositor. Convivir con la desmotivación de ciertos momentos no es sencillo.
Ventajas de opositar
En realidad, las ventajas de hacer una oposición no tienen un valor absoluto y aplicable a todos los casos, puesto que no todas las personas tienen el deseo de presentarse a una prueba de estas características. Otros profesionales desean emprender, por ejemplo. ¿Cuáles son las ventajas de opositar cuando esta es tu visión a corto plazo?
1. Empleo estable. El trabajo ocupa buena parte del tiempo en la vida de una persona. Frente al riesgo de la estacionalidad y el desempleo, lograr un buen puesto en una oposición te ofrece la oportunidad de concretar un proyecto de vida contando con la estabilidad económica y financiera.
2. El sueldo de los funcionarios. Un buen trabajo queda definido por distintas características. Una de ellas, las condiciones económicas de ese empleo.
El suelo de los funcionarios también tiene un componente emocional que eleva el salario anímico de aquel profesional que observa su futuro desde la perspectiva de la seguridad económica. Una seguridad que le permite planificar proyectos personales, por ejemplo, la compra de una vivivenda o el ahorro.
3. Motivación al logro. El plan de acción previo a una oposición te permite prepararte para ese momento que, a posteriori, te aporta la compensación emocional cuando el resultado de la prueba es favorable. En ese caso, ese resultado final se convierte en motivo de celebración emocional. Y si este resultado no es tan optimista, esta experiencia de la oposición es muy importante para prepararte para una próxima ocasión.
4. Opositar después de cumplir los 40. Un periodo de la vida tan significativo como este también puede venir acompañado de la decisión de comenzar un nuevo proyecto profesional. Algunas personas se reinventan a sí mismas a nivel laboral por medio de un plan B que puede integrar la idea de una oposición.
Por tanto, opositar tiene ventajas e inconvenientes. Cada profesional es único y debe tomar su propia decisión a partir de sus circunstancias. ¿Cuál es tu opinión sobre este tema? Las dificultades y los pros de una oposición están muy unidos entre sí. Tendrás que superar los obstáculos del camino hasta llegar a la meta que aporta sentido al esfuerzo previo.