Estudiar una carrera no tiene por qué ser difícil, y mucho menos presencial. En ocasiones, ofertan la FP a distancia, un grado medio a distancia, o superior, con el que cumplir ese sueño formativo sin tener que sufrir los madrugones, las horas en un centro y tener que atender a un profesor.
Pero, ¿conoces todas las ventajas de estudiar una FP a distancia? Te las descubrimos a continuación.
FP a distancia: la misma formación, pero desde tu casa
No muchas personas saben que se puede estudiar la FP a distancia. Es una formación igual de válida que las FP’s presenciales, en las que el alumno utiliza las nuevas tecnologías, sobre todo el uso de un ordenador o tablet e Internet para estudiar a través de vídeos y documentos la carrera que haya escogido.
Además, hay que tener en cuenta que hablamos de múltiples ramas de la FP. Actualmente se ofertan plazas a distancia de muchos estudios, lo que permite encontrar el adecuado y que este se pueda hacer online. Por ejemplo, formaciones de deporte, informática, comercio y marketing, hostelería y turismo, imagen personal…
Qué ventajas tiene la FP a distancia
Un grado medio a distancia, o un grado superior, tiene muchas más ventajas que hacerlo presencial. Aun cuando puedas pensar que de esta forma no tienes apoyo del profesor, en realidad sí que está a tu lado, a través de las tutorías. Y mucho más.
Entre las ventajas a destacar están:
Flexibilidad horaria
En una FP presencial tienes un horario a seguir que, a menudo, puede chocar con tus necesidades, bien familiares, personales o profesionales. Si no puedes asistir, pierdes la explicación y esto hace que dependas de compañeros que te pasen los apuntes.
En cambio, en una FP a distancia tienes todo lo necesario para estudiar en el momento que tú quieras. Puede ser por la mañana, por la tarde, o por la noche, de madrugada… Realmente decides tú el tiempo que le dedicas y cuando, adaptándose así a las necesidades que se tengan.
No tienes que estar en tu casa
Imagina que te sale un viaje con amigos y estás cursando una FP presencial. Lo más normal es que digas que no puedes ir porque tienes clase, y al final te pierdes ese viaje y el tiempo de estar con tus amigos.
O que alguien de tu familia se enferma y tú vives en otra ciudad y no puedes ir a verlo.
Si lo haces, pierdes clases y luego debes estar intentando coger el ritmo.
Pero con la FP no solo tienes flexibilidad, sino que también puedes conectarte desde cualquier parte del mundo.
Eso te permite moverte con mayor libertad y seguir estudiando sabiendo que no te pierdes nada. Mientras tengas Internet y un dispositivo con el que poder entrar en la plataforma no vas a necesitar nada más.
Marcas tu propio ritmo
En ocasiones, hay temas que cuestan más a unas personas que a otras. Y cuando se está en una formación presencial el profesor es el que marca el tiempo que va a dedicar a cada clase y tema. Pero, ¿y si tú necesitas ir más despacio, o más rápido?
Al final te tienes que adaptar a la clase.
Sin embargo, en la FP a distancia esto no ocurre, y en realidad tú puedes seguir tu propio ritmo de estudio. Mientras llegues al final en el tiempo acordado, da igual que dediques más tiempo a unos temas que a otros. No vas a tener a nadie que te marque las instrucciones, de ahí que se llame una formación autónoma donde eres tú quien se encarga de saber el tiempo que necesita cada tema.
Ahorras mucho más
Con ello queremos decirte que vas a ahorrar dinero. Imagina la FP presencial. Tienes que ir a clase, y eso supone un gasto, bien de coche, de autobús o darte un buen paseo si no vives lejos. Tienes que comprar libros, coger apuntes, gastar en bolígrafos, ropa, etc.
Ahora piensa en la FP a distancia. A través de la plataforma tienes la teoría, no tienes que salir de casa y lo único que gastas es la luz y el Internet. A lo mejor incluso imprimir los temas. Pero nada más.
Si echas cálculos te darás cuenta que la FP online es bastante más barata que la presencial.
Fomentas tu responsabilidad y autonomía
No todo el mundo es capaz de sacar adelante una FP a distancia porque esta requiere constancia y compromiso para poder alcanzar la meta, que es tener el título y los conocimientos adecuados.
Pero si te lo propones, no solo obtienes eso estudios, sino también fomentar la responsabilidad (de dedicar tiempo para el estudio) y autonomía (en el sentido de que tú eres tu propio «jefe» en la formación).
Y esto, aunque al principio no lo notes, después influye en el futuro profesional.
Mantienes contacto
No solo con tu tutor y profesor (de hecho, hay varios según las asignaturas que tengas) sino que también puedes estar en contacto con otros alumnos que formen parte del estudio que realizas.
A través de los chats y foros puedes mantener conversaciones con ellos, hacer grupos e incluso traspasar la propia plataforma para conectar a través de WhatsApp o similares.
También tienes un plus al tener contacto con otros alumnos: que estos pueden no estar en tu misma ciudad y tener puntos de vista que no te has planteado. Al haber diversidad también se generan más ideas y formas de ver las cosas que, en la presencial no podrías conseguir.
Accedes a muchos más estudios de los que hay en tu ciudad
El hecho de ofertar estudios de FP a distancia tiene una ventaja frente a la oferta formativa presencial: habrá más estudios online que en tu ciudad. Esto evita, entre otras cosas, el tener que cambiar de ciudad, con el gasto que supone, y cambiar por completo tu estilo de vida.
Gracias a que cada vez se ofrecen más estudios a distancia la conciliación laboral y personal, el no tener que cambiar de ciudad (algo que a muchos le supone un freno porque no pueden permitírselo) ayuda a que consigan formarse en aquello que les gusta sin tener problema.
Como ves, hacer una FP a distancia de grado medio o superior es una posibilidad que deberías tener muy en cuenta. ¿Te ayudamos a solventar tus dudas?