El trabajo desde casa puede llegar a ser rutinario en algunos momentos. El profesional pasa gran parte de su tiempo en soledad, aunque forma parte de un equipo con el que establece una comunicación digital, puede echar de menos el trato más cotidiano con los compañeros de oficina. El profesional que trabaja desde casa observa las consecuencias positivas o negativas de sus propias decisiones en acciones tan concretas como la gestión del tiempo.
1. Cumple los horarios marcados
Por ejemplo, al iniciar con puntualidad las tareas según el horario que te habías marcado, este hecho luego también influye positivamente en cómo evoluciona el ritmo posterior del día. Por el contrario, al posponer el comienzo de la rutina para otro momento después, esta postergación genera un impacto en forma de estrés y urgencia al tener la sensación de estar fuera de tiempo.
No solo es importante que planifiques de manera realista tu calendario, sino también que luego lo traslades al ámbito de la experiencia. En circunstancias concretas, también es importante ser flexible. Por ejemplo, en el momento actual en el que la propia preocupación puede influir en la concentración profesional.
2. Una oficina que te guste
Cuando un trabajador se desplaza a su espacio profesional en la empresa no tiene la oportunidad de elegir el mobiliario o la decoración de la estancia. Esta es una de las ventajas que tienes cuando trabajas desde casa.
Tienes la posibilidad de personalizar este espacio profesional priorizando el estilo decorativo que más te gusta, seleccionando tus colores preferidos y personalizando este lugar con detalles emocionales. Por ejemplo, mensajes en forma de lettering que te inspiran.
3. Orden en el espacio de trabajo
Cuando trabajas desde casa, cambia el escenario en el que realizas tus tareas profesionales. Estás en tu casa, no en las instalaciones de la empresa.
Pero existen ingredientes que son igualmente necesarios en ambos casos. Y uno de ellos es el orden. Un orden que debe cuidarse y mantenerse a lo largo del tiempo. Por ello, para incrementar tu motivación al trabajar desde casa también es recomendable que los primeros minutos de la jornada los dediques a colocar cada cosa en su sitio. La información visual que percibes en una primera impresión de tu lugar de trabajo también te motiva o te desmotiva.
4. Rompe la rutina de vez en cuando
Tal vez en algún momento necesites un cambio en una rutina que te parece idéntica. Es positivo encontrar este equilibrio entre el cumplimiento de la agenda prevista y la posibilidad de integrar alguna novedad. Esta es una de las ventajas del teletrabajo: la flexibilidad. Por tanto, esta flexibilidad se pone de tu parte cuando la utilizas con un fin constructivo. No cuando improvisas continuamente.
5. Pon en valor el trabajo que realizas
El sentimiento de soledad, a veces, puede hacer que una persona no sea verdaderamente consciente del valor que tiene su dedicación y su compromiso. Tu labor es valiosa. Tu labor influye de forma positiva en un proyecto o en la vida de otras personas. Por tanto, valora el objetivo que realizas. Tal vez no siempre recibas el reconocimiento que te gustaría, tal vez te gustaría que alguien alimentase tu salario emocional. Pero esto es algo que tú puedes hacer por ti mismo. Tu esfuerzo de cada día es valioso para ti y para la sociedad.
¿Qué otras fórmulas de motivación en el teletrabajo te gustaría añadir a esta selección de propuestas que añadimos en este artículo en Formación y Estudios? Y, finalmente, para minimizar la sensación de soledad es recomendable estar en contacto con otros profesionales a través de las redes sociales.