El sector turístico proporciona múltiples oportunidades de trabajo, entre otros motivos, porque existen diversas tendencias de viajes. Aunque es habitual que una escapada esté motivada por el deseo de descansar y disfrutar del tiempo libre en un destino especial, los viajes de negocios también se integran en la rutina profesional de empresarios, emprendedores y perfiles que ocupan puestos de responsabilidad. Muchos viajeros eligen el avión como medio de desplazamiento para recorrer distancias significativas. Pues bien, en torno a esta forma de transporte hay distintas profesiones a tener en cuenta. En esta ocasión, profundizamos en las tareas de las azafatas de tierra.
Los profesionales que desempeñan esta función atienden de forma personalizada a cada cliente. Su labor es clave para facturar el equipaje, puede gestionar las reservas, proporcionar información si se produce cualquier incidencia… Una azafata de tierra desarrolla su trabajo en un contexto internacional. Es habitual que atienda a clientes procedentes de distintos lugares. Por ello, es recomendable que se comunique perfectamente en más de un idioma. La labor del profesional señalado también incide positivamente en la seguridad del propio vuelo. Es decir, debe comprobar que accede a su asiento la persona autorizada para ello.
Cómo mostrar disponibilidad para el puesto: flexibilidad de horarios
Si quieres buscar trabajo en el sector, para desarrollar tu labor como azafata o azafato de vuelo, es aconsejable que tengas una flexibilidad horaria (para adaptarte a los horarios de trabajo que destacan por esta particularidad). Por otra parte, el profesional cualificado gestiona una gran variedad de incidencias y situaciones, más allá de la planificación o la previsión con la que afronta la jornada. Es decir, es esencial que cuente con habilidades para trabajar en equipo de forma positiva y, también, para tomar decisiones bajo presión (y cumpliendo la normativa correspondiente en cada situación).
No es imprescindible, pero es positivo contar con una titulación universitaria
Al igual que ocurre en otros sectores, el nivel de empleabilidad aumenta cuando el profesional posee un alto grado de preparación y conocimiento. Por ello, aunque generalmente no es un requisito indispensable haber finalizado una titulación universitaria, este mérito académico sí puede convertirse en una forma de diferenciación en un proceso de selección para acceder a un puesto. Sin embargo, como hemos mencionado previamente, la formación en idiomas es especialmente importante para incrementar la estabilidad profesional en el trabajo desarrollado en el sector. En consecuencia, es recomendable tener un excelente nivel de inglés, pero también es posible completar el currículum con otros conocimientos complementarios.
Inteligencia emocional y social
El perfil profesional también debe destacar por otras habilidades y cualidades personales como, por ejemplo, su inteligencia emocional, su empatía, su cercanía, su disposición para resolver cualquier dificultad, su amabilidad en la atención al cliente, su colaboración para lograr objetivos de equipo… Cada persona que realiza un viaje en avión experimenta una realidad concreta. Algunas personas anticipan esa situación con cierta intranquilidad si tienen miedo a volar. Otras disfrutan de ese momento como una forma de encontrar tiempo para leer o reflexionar sobre uno mismo. En definitiva, la azafata de tierra acompaña a los viajeros y les da la bienvenida en el mostrador.
Si quieres trabajar como azafata de tierra, consulta la información disponible en ofertas de empleo publicadas por diferentes aerolíneas. Aunque las gestiones y tareas realizadas sean similares en lo esencial, hay requisitos que pueden cambiar en función del contexto. Por ejemplo, los idiomas que debe conocer la persona que opta al puesto. ¿Buscas un puesto diferente al de una azafata de vuelo? Entonces, tal vez prefieras ocupar un cargo que se enmarca directamente en el aeropuerto (sin tener que afrontar largos trayectos).